Es una costumbre, entiéndelo. Siempre hago lo mismo, no sé vivir sin llorar, lloró por nada pero es que es inevitable. Como comprenderás a veces no me quedan ni lagrimas ni fuerzas para poder estar contigo a todas horas o simplemente para decirte a todas horas que te quiero. No puedo cambiar, estoy acostumbrada a llorar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario